Sunday, May 16, 2010

CLASE 2 de arte recursero: jugando con papel periódico

El taller de arte se presentaba comoun globo que se va volando por el cielo limeño con color a panza de burro. Era un día de esos limeños típicos como para meterse a la cama aver una pelicula bien abrigado.

Fue realmente motivante que los tres alumnos que asistieron a la clase trajeron algún material que habían recolectado a lo largo de la semana (tapitas de gaseosa, cartón, bolsas de te). Existe una meta grupal establecida desde la primera clase plasmada en una botella grande de agua en donde se van colocando las tapitas de gaseosa recolectadas. Los niños disfrutan del proceso de meter una tapita a la vez. Cada tapita es considerada un éxito grupal y no personal.

Se presentó el material a utilizar: el periódico, como base del proceso creativo. Generalmente te dicen qué hacer y después tú decides cómo lo haces y con qué. Aquí, les dimos el con qué (el material) y dimos la libertad de pensar para pensar el qué y el cómo.

Se presentó a los niños un cerro de papel periódico, otro de volantes de papel un poco más grueso, brochas, esponjas y pinturas. La idea inicial consistía en armar cajas, forrarlas de papel periódico y luego pintarlas. Frente a la pregunta, ¿quieres armar una caja? una niña respondió con total seguridad: no. Luego agarró un pedazo de madera que había estado trabajando la clase pasada.

Pensé... si quiero que aprendan a usar el papel periódico como material para hacer arte, por qué es restringirlos además, con lo que tienen que hacer? Eso podría llamarse recurseo de ideas.

Así la clase evolucionó hacia que cada uno tuviera la libertad de hacer lo que quisiera siempre y cuando utilizara el periódico para relacionarlo con alguna superficie o material. Las opciones fueron la caja de cartón construida con volantes, un pedazo de madera o la pared que habíamos empezado a pintar con las manos la clase pasada.

Cada uno mantuvo la atención en su elección durante casi toda la clase. Fue interesante poner una meta y proponer que se cumpla a lo largo de las dos horas. El niño llegó a forrar la caja para dejarla secar… La niña pegando recortes en un pedazo de madera chico paso a uno bastante largo y trabajó para llega a llenar toda la tabla (al final de la clase ya casi lo había hecho y mantuvo la concentración)… La niña pegando recortes de periódico en la pared llegó a colocar todos los pedazos recortados. Cada uno mantuvo su campo de trabajo. Fue interesante ver cómo a pesar de que cada uno estaba inmerso en su actividad, se apoyaban y trabajan juntos. De vez en cuando todos iban a la pared a pegar algún recorte y se mantenía una conversación en grupo.

El trabajar algún aspecto del cuarto de manera periódica (cada día se avanza un poquito… el muro como un collage y un recuento de la temática de cada una de las clases). El hecho de que yo y otra persona adulta trabajamos CON ellos aportando con recortes facilitó el proceso y lo hizo más interactivo.

Al final de la clase, a modote seguir con la decoración del espacio, cada uno agarró un paquete de stickers rectangulares de colores fosforescentes (etiquetas) para irlas pegando en las patas de la escalera-repisa.

Lecciones recurseras:
Combo perfecto: limitaciones de material y libertad de aplicación - Proponer una meta que sea cumplida - Mantener interacción e intercambio entre los trabajos de cada alumno - Participación de adultos en el juego, involucrar a los padres en el proceso de recolección - Continuar con la meta general de ir ambientando el espacio - Al final de la clase, explicar de qué consistirá la siguiente y darles una misión recursera.

No comments: